“El tratamiento con corticoides orales y posteriormente con isotretinoína oral es el más aceptado en la literatura para esta variante de acné.”

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DR. JESUS ÁNGEL MOLINERO CATURLA, Dermatólogo. Hospital de Bellvitge. Llobregat.

En este artículo el autor nos presenta cinco casos de acné fulminante en varones adolescentes con una media de edad de 16,4 años. Se trata de una rara e infrecuente forma de acné, la más grave, que siempre se acompaña de síntomas sistémicos y alteraciones analíticas de laboratorio. Los cinco pacientes presentaron previamente acné leve ó moderado y, súbitamente, sin desencadenante conocido (fármacos, infecciones…), sufrieron un empeoramiento marcado de sus lesiones cutáneas con desarrollo de múltiples nódulos supurativos, placas acneiformes y papulopústulas en tronco, hombros y cara. Todos ellos asociaban un cuadro de manifestaciones sistémicas con fiebre alta, artralgias, dolores óseos, astenia, anorexia y pérdida de peso. Las alteraciones analíticas incluían leucocitosis con neutrofilia. Los cultivos microbiológicos de las pústulas cutáneas resultaron negativos en la mayoría de los casos, así como los hemocultivos. Todos ellos fueron tratados con prednisona oral (rango 40-60 mg al día) hasta que remitió el cuadro inflamatorio tanto cutáneo como sistémico, con buena respuesta al mismo ya en la primera semana de tratamiento. En dos de los cinco pacientes hubo cicatrices desfigurantes. Una vez controlado el cuadro agudo, el autor aconseja introducir isotretinoína oral como tratamiento de base del acné residual. El tratamiento con corticoides orales y posteriormente con isotretinoína oral es el más aceptado en la literatura para esta variante de acné.

Parece ser que la etiopatogenia del cuadro podría explicarse por el hecho de que Propionibacterium acnes sea capaz de comportarse como un superantígeno inductor de una intensa respuesta de anticuerpos responsable del cuadro agudo cutáneo-sistémico. En ningún caso se ha encontrado septicemia (ni en los más severos).

El acné fulminante es la forma más grave de acné y se caracteriza por el desarrollo súbito de lesiones acneiformes nodulares y supurativas asociadas a manifestaciones sistémicas. Esta rara variante afecta a niños de entre 13 y 16 años. Entre las manifestaciones sistémicas, siempre presentes e imprescindibles para el diagnóstico, se encuentran la fiebre, las artralgias, las mialgias, la hepatoesplenomegalia y un intenso malestar.

Para el tratamiento del acné fulminante se suelen utilizar corticoesteroides orales e isotretinoína oral, generalmente administrando esta última a bajas dosis y/o después de que la inflamación aguda haya remitido. Paradójicamente, durante las primeras semanas de tratamiento del acné con isotretinoína se pueden producir muy raramente brotes que se asemejan al acné fulminante y que pueden ser evitados iniciando los tratamientos con dosis bajas del fármaco. Los antibióticos orales suelen ser ineficaces. Otras terapias posibles son los inhibidores del TNF-?, la azatioprina y la dapsona.